CLASIFICACION DE LOS LICORES
1.
Según
la forma de elaboración:
Aquellos con
una sola hierba predominando en su sabor y aroma.
Los que están
elaborados a partir de una sola fruta, por ende sabor y aroma.
Los producidos
a partir de mezclas de frutas y/o hierbas.
2.
Según
la combinación alcohol/azúcar los licores pueden ser:
• Extra seco: hasta 12% de
endulzantes.
• Seco: con 20-25% de alcohol y
de 12-20% de azúcar.
• Dulce: con 25-30% de alcohol y
22-30% de azúcar.
• Fino: con 30-35% de alcohol y
40-60% de azúcar.
• Crema: con 35-40% de alcohol y
40-60% de azúcar.
También pueden
clasificarse de acuerdo al número de sustancias aromáticas y saborizantes que
intervienen en su elaboración. Así pueden ser:
·
Simples: cuando se elaboran con una sola
sustancia, aunque se utilicen pequeñas cantidades de otras, para mejorar el
sabor o potenciar el aroma.
·
Mixtos: son los que llevan, en distintas
proporciones, pero con igual importancia, varios ingredientes. Los licores más
finos se preparan destilando alcohol de alta graduación en el que se ha
macerado un saborizante, o una combinación de ellos y tratando el destilado con
azúcar y generalmente, con materias colorantes. Entre los saborizantes más
utilizados están, entre otros, la corteza de naranja, la semilla de alcavarea y
el endrino. Muchos licores han sido elaborados por monjes como los Cartujos o los
Benedictinos. Los licores pueden servirse como aperitivos o después de las
comidas y también como ingredientes en combinaciones de bebidas y cócteles.
Los licores son conocidos por sus nombres genéricos, su sabor, color y
graduación alcohólica.
Aquí están las marcas más reconocidas y comunes de encontrar en
cualquier bar; las premium suelen tener un coste más elevado y ser de mejor
calidad.
·
Standard:
o
Bols
o
Cusenier
o
Peters
o
Dellepiane
o
Tres
Plumas
·
Premium:
o
Larios
o
Marie Blizard
o
De Kyper