POESÍA AL TRABAJO
El trabajo que día a día realizamos;
ese afán que ocupa nuestro quehacer;
el que vivimos los hombres que a la familia amamos
persiguiendo el pan de cada día.
Hay un mundo de obligaciones que cumplir
en el trajín laboral por un salario;
que para cruzar el río es necesario,
que muchos sacrifiquen su destino.
Cual la hormiga, que se amasija y se resigna,
así el hombre en su hacer se sacrifica;
y de siempre siempre eso fue lo digno.
Cuando enjuga como perlas su traspiro,
sabe aquellas como ejemplos por sus hijos,
y adorna sus cansancios con sonrisas.