RAFAEL CORREA CASI UNA DECADA DE GOBIERNO
Ecuador se está convirtiendo en un país modelo en toda Latinoamérica, azotada por la pobreza y
el subdesarrollo.
Rafael Correa, un
economista de origen humilde que estudió en el extranjero, propugnó una política social
que él mismo ha tildado como "revolución ciudadana".
Correa llegó al poder
en 2006 cuando la nación ecuatoriana atravesaba una inestabilidad política
crónica, pues en nueve años habían ya desfilado siete presidentes distintos. El
panorama económico de entonces también era lamentable. Los retos a los que se
enfrentaba parecían enormes, pero su habilidad y su empeño dieron la vuelta a
esa situación y Ecuador vuelve a dirigir su destino.
Claves del éxito de Correa:
1. Reducción de la
pobreza: Ha sacado a millón y medio de ecuatorianos
de la pobreza desde 2007 a 2015, mediante medidas como el denominado Bono de
Desarrollo Humano, un subsidio a las personas más desfavorecidas. De forma
paralela, ha aumentado la clase media, motor del crecimiento económico.
2. Renegociación de la
deuda externa: un problema estructural para Ecuador, que
ha supuesto un ahorro de 7 millones de dólares a las arcas del Estado, dinero
que ha podido ser invertido en infraestructuras energéticas, transporte, salud
y educación.
3. La educación, una
prioridad: El reparto presupuestario ha convertido a
Ecuador en el país latinoamericano que más invierte en Educación. El 5,3%
del PIB, unos 300 millones de dólares, se destinan a educación cada año. Eso es
una gran apuesta por el futuro que revertirá indudablemente en las nuevas
generaciones, mucho mejor preparadas que las anteriores.
4. Creación de un
"sistema de rentas internas": La nueva gestión del cobro de
impuestos a los ciudadanos ha logrado superar el grave problema de la evasión
fiscal, un auténtico dolor de cabeza y muy habitual en toda la región. La
fórmula, que ha triplicado la recaudación, se ha basado en la promoción y la
transparencia.
5. Reformas económicas
y financieras adecuadas: Ha favorecido el aumento de sueldos,
el cooperativismo y la industria nacional, ha protegido de la usura a los
usuarios de los servicios bancarios, ha instaurado un fondo de liquidez para
los bancos y ha modificado el estatuto del Banco Central de Ecuador que ahora
depende directamente del Gobierno. Ha aprovechado perfectamente las
herramientas que tenía disponibles y quería emplear, sorteando el tremendo
handicap que supone que la moneda oficial ecuatoriana sea el dólar.
6. Establecimiento de
políticas públicas: Correa se ha esforzado en defender
los derechos fundamentales que se recogen en la nueva Constitución, que data de
2008; ha elevado el nivel de la sanidad lo que ha reducido los índices de
mortalidad infantil.
7. Lucha contra el
desempleo: Ha cerrado el año anterior con la tasa de
desempleo más baja en relación a Perú, Brasil y Chile. Del 10% en 2006, cuando
llegó al poder, ha pasado al 4,5% en 2014.
8. Crecimiento
sostenido: Hasta el momento, Correa ha tenido la
suficiente cintura para mantener el crecimiento, y no amenaza con la aplicación
de ajustes que desatan las protestas ciudadanas, como es el caso de Brasil o
Argentina. Ahora, no obstante, la coyuntura ha variado sustancialmente. En
especial porque el precio del petróleo —principal fuente de riqueza de
Ecuador, que es miembro de la OPEP- ha caído de forma abrupta, lo que va a
tener un fuerte impacto en los presupuestos del Estados y el balance de las
exportaciones.
9. Débil oposición: La hegemonía
correísta concentrada en su partido —alianza PAIS- se ha consolidado
gracias a una oposición que ha dado muchas muestras de estar dividida y
debilitada. Desarticulados los partidos históricos como Izquierda Democrática
(socialdemócrata) o el Partido Social Cristiano (conservador) y sin relevo de
líderes nacionales, las recientes elecciones locales de 2014 han sacado a la
luz a distintas figuras opositoras —alcaldes y prefectos- que en ningún
caso suponen todavía ninguna amenaza.