COREA DEL SUR DE PEQUEÑO A GRANDE
En 1950, Corea del Sur tenía un
ingreso per cápita de 900 dólares anuales, mientras que el de Venezuela era de
7.400 dólares, el de Argentina de 5.000, el de México 2.000, y el de Brasil
1.200. Hoy en día, Corea del Sur tiene un ingreso per cápita de 27.000 dólares
anuales, alrededor del doble que los de Venezuela, México y Argentina.
Actualmente es uno de los países que produce más patentes de nuevos productos.
En 2008, registró 7.500, muchísimas más que Francia (3.200), Gran Bretaña
(3.100) España (300), Brasil (100), México (55) o Argentina (30). En la década
del 60, cuando su economía cayó en picada, Corea decidió que para crecer necesitaba
exportar, y que para exportar necesitaba producir, y que para producir necesitaba
educar.
Corea pasó de convertirse de un
país pobre en uno de los más avanzados del mundo en pocas décadas por la
inversión familiar en la educación y luego la inversión nacional en las
escuelas y en los profesores. El primer destino del ingreso económico familiar
es la educación de los hijos. Hoy se invierte parte muy importante del
presupuesto familiar en clases particulares, viajes de estudios, viajes al
extranjero, visitar a museos, etc. Muchos padres ahorran toda la vida para que sus
hijos puedan estudiar el mejor inglés. Actualmente el 81% de todos los graduados
en la escuela secundaria siguen estudiando en la universidad, el porcentaje más
alto del mundo.
Corea del Sur es un competidor
directo de Japón en el liderazgo global de fabricación de productos
electrónicos y de la industria automovilística y náutica,
Un factor de su desarrollo
económico es el ‘chaebol’ que es un conglomerado empresarial basado
principalmente en la diversificación de la producción, en la utilización de
tecnologías avanzadas y en su capacidad de adaptarse con agilidad a los
cambiantes entornos económicos. A lo largo de los últimos 40 han llevado el
peso del crecimiento en Corea del Sur y algunos, como Samsung o Hyundai, son
líderes en el mercado internacional.
El Estado de bienestar es una
realidad en Corea del Sur gracias a las políticas sociales aplicadas a lo largo
de los últimos 50 años. A pesar de los problemas que plantean los cambios
demográficos, la sociedad coreana aspira a un mejor nivel de vida.
Las tecnologías de la información
y la comunicación (TIC) forman parte de todos los ámbitos de la vida cotidiana
en Corea del Sur, uno de los países del mundo más conectados digitalmente. La
gran demanda de educación basada en las TIC está llamada a consolidar la
posición de Corea como líder mundial en estas áreas.